• Especialmente a los propietarios de los 140 municipios catalanes, donde previsiblemente se declaren zonas tensionadas.
• Los propietarios no deben cerrar sus viviendas al alquiler residencial, porque pese a las regulaciones, sigue siendo la opción más rentable, frente al turístico o el temporal, según un reciente estudio de Alquiler Seguro.
Alquiler Seguro ha lanzado un mensaje de optimismo a los propietarios de toda España, donde los anima a seguir apostando por el alquiler residencial, pese a la reciente aprobación, por parte del Gobierno, del índice que regulará los precios de alquiler en las zonas que se declaren tensionadas.
“Nos queremos dirigir a todos los propietarios, especialmente a los propietarios de viviendas de alquiler en Cataluña, que será seguramente la primera Comunidad Autónoma donde se aprobarán las primeras Zonas de Mercado Tensionado, para animarlos a que mantengan sus viviendas en alquiler, a pesar de que les pueda afectar o no el índice de precios, subraya el director general de Alquiler Seguro, David Caraballo.
A pesar de las regulaciones, el alquiler residencial sigue siendo la opción más rentable frente al turístico o el temporal
“Como hemos avanzado en un estudio reciente , el alquiler residencial es la opción más rentable y segura, frente al alquiler turístico o temporal. Los propietarios que tengan viviendas de alquiler en los 140 municipios catalanes, donde seguramente se declaren como zonas tensionadas, deben seguir destinando sus viviendas al alquiler, y sería muy positivo para el mercado que otros propietarios abrieran sus viviendas al alquiler y de esta manera aumentando la oferta, ahí sí podrían moderarse los precios y se ayudaría a más familias a poder acceder a una vivienda en alquiler”, apunta David Caraballo.
“Desde Alquiler Seguro, señala su director general, creemos que el principal problema del alquiler es la falta de oferta, que ha tensionado el mercado, con unos precios al alza. No creemos que un índice de precios sea la mejor solución a un problema de fondo, que es la falta de viviendas en alquiler en las principales provincias españolas.